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Apología del crimen del director Oliver Stone, cuya manera de enfocar la película ha logrado más enemigos que adeptos, al exagerar las tomas con secuencias de excesiva e innecesaria violencia. Si bien Estados Unidos tiene un problema grave con las armas y la violencia entre pandillas y entre gente con problemas de adaptación a la sociedad, bien es cierto que se pudo haber dado un sentido más pedagógico a un film con una gran cantidad de escenas en las que simplemente se toma a broma términos como el parricidio.
Ahora bien, tenemos el personaje de Robert Downey Jr. y a Tommy Lee Jones, como periodista amarillista y corrupto jefe de cárceles, interpretando de una manera nuevamente artificial y en exceso rocambolesca, al sobreactuar las reacciones y acciones en lo relacionado con Mitch y Mallory Knox (Woody Harrelson y Juliette Lewis). Una de las escenas donde queda ilogicamente justificada la violencia y los asesinatos es aquella en la que dicen: "Inocentes? Conoces tu a alguien inocente?" Todos hemos hecho algo por lo que merecemos morir en el pasado y ese es el punto. Cuando alguien muere, el o ella lo merecen por alguna razón . No has escuchado a ninguna persona "Mataría a ese tipo" o "Espero que murieras"?
En fin, respetuosamente hablando, me parece un film donde se enaltece no a la violencia en si, sino a dos seres completamente descerebrados que la cometen simplemente porque les gusta. En cuanto al estilo de Oliver Stone, ya es bien sabido, como en su JFK y DOORS, muchos flashbacks en blanco y negro, metáforas históricas, mucha influencia de drogas, claro que con una buena dirección artística, edición, etc. Con tantos buenos recursos se pudo hacer una película mínimo 10 veces mejor. Para ejemplos, la escena donde Mitch conoce a Mallory en su casa y en la que aparece Rodney Dangerfield personificando a su padre. Una verdadera demostración de mal gusto
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